SAN JUAN (Puerto Rico) - Con 16 años de edad, la anatomía de Rafael Pinzón sobresale de los demás jugadores. Son 6 pies y 5 pulgadas de habilidad con brazos tan largos que pueden acorrarlar a la defensa, poner el balón en el suelo para llegar elegamente al aro o facilitárselo a un compañero para un tiro totalmente abierto.

Pinzón forma parte de la Selección Nacional de Puerto Rico que logró medalla de plata durante el recién terminado Campeonato Centrobasket Sub-17 en San Juan. El estelar armador/escolta finalizó el torneo con promedio de 17 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias por partido para una eficiencia de +16.

Los primeros dos minutos de dos de sus partidos de primera ronda fueron una buena muestra de la versatilidad que puede ofrecer Pinzón. En el primero anota finamente un triple sin dudar que pone a Puerto Rico arriba 3-0 sobre Isla Vírgenes rumbo a una contundente victoria. Mientras que en el segundo partido ante El Salvador, Pinzón driblea por detrás de la espalda para frisar la defensa y depositar el balón en el canasto con su mano zurda.

Días más tarde, en la ronda semifinal frente a una aguerrida República Dominicana, Pinzón se creció para cargar a Puerto Rico con 28 puntos y darle el pase a la ronda final.

La fanaticada en el Coliseo Roberto Clemente parecía ver un flashback del cotizado jugador puertorriqueõ Raymond “Richie” Dalmau. Se trata de un armador de 6’5’’, que driblea con la mano zurda, es inteligente y crea amenaza de ataque en todas la posesiones. Curiosamente, muchos de los que presenciaban el juego eran leyendas de baloncesto boricua como Raymond Dalmau [padre de Richie] y su hijo menor Ricardo, así como Edgar Padilla y Eddie Casiano, coach nacional adulto.

“Para mí es mejor que jugar con cualquier club. Estoy representando a mi país y estoy en casa, es otro tipo de sentimiento”, dijo Pinzón a FIBA.basketball sobre la oportunidad de vestir el uniforme nacional en suelo Borincano.

Las ejecutorias de Pinzón ya le ha ganado varias ofertas para el baloncesto colegial que tendrán que esperar al menos dos años más, en 2021, cuando el joven baloncelista complete su escuela superior. Las universidades de Georgia Tech, Mercer y Dayton ya pusieron ofertas sobre la mesa de Pinzón. Todo esto luego de ser exportado al baloncesto escolar norteamericano con la Academia Lincoln de Georgia, proveniente del Colegio San Felipe en su ciudad natal Arecibo.

“Rafael Pinzón es un point guard que no se daba aquí hace tiempo”, dijo su dirigente Jorge Rincón. “Es un point guard de 6’5’’ alto, como Richie Dalmau en sus tiempos, un tipo que mete el tiro corto, toma buenas decisiones, está por encima de todos los jugadores contrarios para poder hacer un buen pase, penetra bien, muy inteligente, es un prospecto que hace tiempo no se daba aquí en Puerto Rico.”

Y es que cada vez que Pinzón está en cancha exhibe un estilo de juego desprendido, siempre trata de tomar la decisión correcta, en muchas ocasiones favoreciendo un pase al compañero antes que un tiro propio.

“Yo creo que [mi rol es] hacer a mis compañeros mejores, que se vean bien en la cancha, correr el sistema para elevar el nivel de juego, defender y ganar una medalla de oro”, dijo Pinzón antes de la final.

Cuando no está escuchando música de su rapero favorito Almighty, Pinzón está en la cancha perfeccionando su juego. Principalmente trabajando en el tiro a larga distancia, que es la única arma ofensiva que armador/escolta puede añadir a su arsenal para hacerse casi imposible de defender. Fuera de la cancha, el estelar jugador sueña con un futuro como fisiatra o terapista físico, interés que pudiera ser producto de la lesión de rodilla que sufrió en 2018 y que lo sacó de circulación por casi un año. De la cual Pinzón todavía intenta recuperarse al cien por ciento.

Es el tipo de prospecto que desde hace algún tiempo la selección nacional de Puerto Rico deseaba tener en sus filas, un proyecto a largo plazo que promete ser protagonista para los boricuas internacionalmente.

“Cada vez que vemos a Pinzón jugando sigue mejorando, así que no hay techo en cuanto al potencial que él tiene”, dijo el dirigente del equipo nacional adulto Eddie Casiano. “Es un point guard alto, un point guard europeo, puede ser [comparado con] Richie como puede ser también Fico López, depende cómo él desarrolle sus destrezas físicamente como mentalmente”.

Como muchos otros canasteros jóvenes el sueño de Pinzón es llegar a la NBA como su jugador favorito Kobe Bryant. Al menos ya, salió favorecido en todas las loterías genéticas. Es el primer ejemplar de una figura que promete cargar a Puerto Rico durante la próxima era. En las palabras del coach del equipo de México Enrique Zuniga luego de enfrentarlo en la final del Centrobasket Sub-17, “Pinzón es muy bueno, yo creo que es el futuro de la selección boricua”.

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