SAN JUAN (Clasificatorios de las Américas a la Copa del Mundo FIBA 2019) – En su primer año con la selección nacional de Puerto Rico, el escolta Gian Clavell se ha convertido en una pieza clave en el juego de los boricuas en su misión de lograr el pase al máximo evento del baloncesto internacional.

El canastero de 24 años debutó con el equipo caribeño en la primera ventana de las eliminatorias a la Copa del Mundo China 2019 y desde entonces ha dicho presente en todas las convocatorias del técnico Eddie Casiano.

“Siempre es un orgullo ponerte la camiseta de Puerto Rico y representar a tu isla”.
- Gian Clavell, Puerto Rico

 Como todo buen puertorriqueño, de niño Clavell disfrutaba de ver jugar al combinado isleño y ahora tiene la responsabilidad de ser parte de un grupo que buscar regresar a Puerto Rico a un lugar de respeto a nivel internacional como lo fue, en tiempo más reciente, en gran parte de la década de 1990.

El anotador de 6’4” disfrutó de su primer podio en uniforme de la selección cuando hace varias semanas formó parte del equipo que ganó la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Barranquilla. Aunque para algunos, este logro sea uno de poco reconocimiento, para Clavell fue importante porque sienta las bases de lo que pudiera ocurrir en el futuro para la selección de Puerto Rico.

“No importa donde sea, ganar oro es ganar oro. Ganamos oro para Puerto Rico y la familia se siente bien. Significa que estamos en el camino correcto para llegar a donde queremos. Creo que estamos paso a paso, estamos cerca, no nos falta mucho”, dijo Clavell al destacar lo que se sintió estar en lo más alto del podio.

“Centroamericanos fue un orgullo, pero queremos (estar en un) Mundial, queremos grande. No estamos aspirando para cosas pequeñas, estamos aspirando  cosas grandes. Eso es lo que estamos buscando, para lo que uno se prepara”, añadió Clavell, quien cuando veía jugar a la selección seguía la acción de jugadores como Casiano, José Juan Barea, Carlos Arroyo, Larry Ayuso,  David Huertas y Javier Mojica.

En sus primeros seis partidos de la eliminatoria, Clavell se dejó sentir con promedios de 12.5 puntos y 2.8 rebotes, y es una figura de confianza para el dirigente Casiano.

Unos años antes que Clavell naciera, Puerto Rico sorprendió al mundo al llegar en cuarto lugar en la Copa del Mundo de 1990. Los boricuas fueron consistentes clasificando a mundiales y olimpiadas, pero desde 2005, la suerte no ha estado de su lado. Para Japón 2006, Puerto Rico fue invitado a dicha cita mundialista. En aquel torneo, y en Turquía 2010 y España 2014, los boricuas quedaron fuera de la primera ronda.

A nivel olímpico, Puerto Rico no clasifica a ese evento desde Atenas 2004, quedándose a una victoria de lograr un puesto en las pasadas tres Olimpiadas. Clavell está consciente que el camino es difícil para los boricuas, pero confía en el proceso.

“Hay que hacer un trabajo en equipo. Todo el mundo junto para llegar al Mundial y Olimpiada. No es fácil, para los Centroamericanos no practicamos y ganamos”.- Gian Clavell

 “Los fanáticos van a criticar y eso es parte del juego. Siempre los fanáticos hablan positivo o negativo y eso es lo divertido para mí. Esperamos que nos sigan apoyando mucho en este proceso. Que pase lo que pase, estamos jugando con el corazón para llegar a otros niveles, que es lo más importante”, dijo el jugador. 

En su joven carrera, Clavell tiene experiencia en la NBA, la liga de Turquía y en la próxima temporada jugará en la ACB de España con el Club Estudiantes.

Como escolta, y en ocasiones alero en la selección de Puerto Rico, Clavell le sigue los pasos a jugadores nacionales que estuvieron en su posición como Casiano, Ayuso, Mario “Quijote” Morales, entre otros. Clavell no siente ese peso sobre sus hombros.

“No, yo soy Gian Clavell y soy diferente. Uno es único. Para mí no hay presión, la presión es para quien no esté preparado para esas cosas. Tú te preparas todo el año para jugar al máximo nivel”, señaló confiado el escolta, quien describió su juego como atlético, le gusta defender y “soy más atrevido, Eddie te lo puede decir”.

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