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07/04/2020
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Fabricio Vito y una mirada distinta

Corren la cancha a la par de los jugadores e incluso a veces deben tomar decisiones más complicadas que elegir entre un pase o un tiro al aro. Los árbitros también son un eslabón importante a la hora de cada torneo, y sobre todo en uno tan significativo como la Basketball Champions League Americas, el máximo certamen continental.

Fabricio Vito es un juez argentino, que a sus 45 años, forma parte del staff que dirige el torneo y cuenta su experiencia: "Me gusta mucho la competencia, me tocaron varios partidos y con mucha gente. El formato me encanta y me siento muy a gusto. Hay grandes clubes que tienen buen nivel de juego, buenas plantillas, buenas instalaciones y marcan el rumbo".

El nacido en Punta Alta dirigió la primera semifinal entre Quimsa y San Lorenzo cuando los santiagueños ganaron en Boedo. Y cuenta cómo se adapta al cambio de reglas y cómo ve el nivel de los árbitros en el continente: "Estoy acostumbrado a los continuos cambios, ya hace casi 30 años que soy referee y me sigue apasionando como el primer día este hermoso deporte. Creo que hay un muy buen nivel de árbitros con experiencia comprobada en FIBA mundo, a su vez existen muchos jóvenes que son buenas promesas".

La pandemia del coronavirus hizo suspender toda la actividad, pero cómo se hace para seguir en forma. Así lo cuenta Fabricio Vito: "Es un momento raro, pero hay que ser solidario e inteligente quedándose en casa para prevenir algo que puede ser peor. Extraño el día a día normal, todo lo que conlleva ser un referee profesional: preparativos, viajes, partidos, recorrer ciudades, aeropuertos. Ahora estoy con tareas que no siempre puedo hacer como pintar o reparar cosas, y disfruto de mi familia. Estoy entrenando casi todos los días en doble turno con lo que tengo a mano, por lo que cuando vuelva la competencia, estaré en forma".

¿Los árbitros tienen alguna cábala antes de entrar a la cancha para dirigir un partido? "Tengo rutinas que hago en cada juego. Escucho música camino al estadio, recorro la cancha chequeando el IRS y saludando a los oficiales de mesa, en el vestuario hago la charla pre-game, ejercicios de streching y por último siempre entro con el pie derecho a la pista".