Los jugadores de baloncesto acaparan los focos en la ceremonia inaugural de Río

RIO DE JANEIRO (Juegos Olímpicos de Río) - Han pasado casi 20 años desde que los grandes de Brasil Oscar Schmidt, Adriana Santos y Hortencia Marcari jugaron por última vez en unas Olimpiadas, pero el viernes ellos se aseguraron de dejar su espíritu olímpico en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Río 2016.

Un Maracaná lleno hasta la bandera entró en júbilo cuando el cinco veces olímpico y Hall of Fame de la FIBA fue presentado al público como uno de los portadores de la bandera olímpica. 

Schmidt, conocido en los círculos del baloncesto como la Mano Santa por su facilidad anotadora, entró en los libros de la historia olímpica estableciendo el récord de más puntos anotados (55) en un partido en las Olimpiadas de 1988. 

Santos, que jugó en los Juegos de Barcelona 1992 y que ahora es la directora del equipo femenino nacional femenino, tomó el pebetero en nombre de todos los entrenadores presentes en los Juegos de Río. 

Hortencia, conocida como la Reina del Baloncesto en su país natal Brasil, recibió la antorcha olímpica de manos de la leyenda del tenis Gustavo Kuerten antes de entregársela a Vanderlei Cordeiro de Lima, que fue el encargado de encender la llama olímpica en el estadio de Macaraná. 

FIBA