BRA - Marcelinho sigue marcando diferencias para su selección
BARCELONA (FIBA Basketball World Cup) – La historia va a mirar con una sonrisa a lo que Marcelinho Huertas ha sido capaz de lograr sobre una cancha. Los aficionados le adoran en España, donde juega profesi
BARCELONA (FIBA Basketball World Cup) – La historia va a mirar con una sonrisa a lo que Marcelinho Huertas ha sido capaz de lograr sobre una cancha. Los aficionados le adoran en España, donde juega profesionalmente con el Barcelona, y ahora espera mantener esos apoyos para cuando juegue próximamente con la selección de Brasil.
Es duro imaginar a un equipo brasileño donde el base de 1,90 esté driblando con la bola en la cancha o haciendo un lanzamiento a una pierna, puesto que el nativo de Sao Paulo ha estado siempre presente en el equipo desde 2005 en el campeonato FIBA Américas..
Cada año es importante para el crecimiento del equipo. Pero en los partidos importantes es donde Marcelinho se crece como demostró en el quinto partido de las semifinales de la Liga Endesa con el Valencia.
Anotó 22 puntos y consiguió nueve asistencias en aquel encuentro que resolvió sobre la bocina venciendo por 77-75. Algo cercano espera conseguir este año con la camiseta de Brasil puesta.
Estará en el equipo nacional este verano en la Copa del Mundo cuando Brasil compita en el grupo A contra el anfitrión España, Francia, Serbia, Egipto e Irán.
“No hay nada más excitante que jugar un gran torneo en España. Pienso que para todos nosotros será una gran experiencia pero también un momento importante para hacer algo importante con el equipo nacional. No podría estar más emocionado”.
Marcelinho ha tenido altos y bajos con Brasil. En 2009, ayudó al equipo a ganar el título del FIBA Américas en Puerto Rico.
Al año siguiente en Turquía, se dejó la piel en el último partido de Brasil en el campeonato que perdieron. Anotó 32 puntos insuficientes para vencer a Argentina, que ganó por 93-89, en octavos.
En 2011, el veterano fue fundamental para que Brasil alcanzara la final del FIBA Américas en casa de Argentina, y permitió como resultado que Brasil se clasificara por primera vez para unos Juegos Olímpicos desde 1996.
Tras llegar a cuartos en Londres, Brasil hizo un papel muy pobre en el FIBA Américas de 2013 donde perdió los cuatro partidos que disputó y necesitó una invitación para poder participar en la Copa del Mundo.
“Tuvimos un verano duro, un equipo sin rodaje con muchos jóvenes y gente sin experiencia. Algunos veteranos no pudieron venir por diversas razones y pagamos la inexperiencia. Fue duro no poder clasificarnos pero gracias a la historia del baloncesto de Brasil y a todo el buen papel que hemos hecho en los torneos internacionales conseguimos la invitación. Somos unos afortunados”, expresó.
No hay dudas a la hora de pensar en cómo Marcelinho será recordado en la historia del país. Su compromiso cada verano y su electrizante forma de jugar le definen.
“Espero ser una parte de un grupo de jugar de élite que jueguen un gran baloncesto durante esta Copa del Mundo y que nos haga más y más grandes. Para mí es un gran honor, espero poder dar lo mejor de mí mismo en lo que me queda en mi carrera”.
FIBA