Fuzaro es designado Jugador Más Valioso; Ferreyra, Gemerson, Oglivie y Mitchell completan el Quinteto Ideal
BUENOS AIRES (Argentina) – El escolta-alero de Baurú, Danilo Fuzaro, fue designado Jugador Más Valioso de la edición número 25 de la Liga Sudamericana de Baloncesto, que se jugó hasta este domingo en el estadio de Obras Sanitarias, en Buenos Aires, Argentina.
Fuzaro anotó 13 puntos en la Final, con 4 rebotes y 1 asistencia, para encaminar la victoria de su club sobre San Martín, por 66-57. En el tercer cuarto del partido, el accionar del jugador fue vital con 12 tantos, para que Baurú pudiera tomar una ventaja de 59-46, que a la postre fue definitiva.
En el Final 8 que se jugó en la última semana, Fuzaro promedió 12.6 puntos, 4.2 rebotes y 2.4 asistencias. También tuvo un partido de 18 unidades y 9 rebotes en Cuartos de Final ante Boca Jrs.
El Quinteto Ideal de la competición lo completaron:
Santiago Ferreyra - San Martín (Base)
El armador de 25 años tuvo un brillante aporte para que su equipo llegara a la instancia decisiva. Durante el Final 8 promedió 14.8 puntos, 3.6 rebotes y 4.2 asistencias. Tuvo dos partidos de +20 puntos y 5 asistencias ante São Paulo en Cuartos de Final y en Semifinales frente a Oberá.
Gemerson Silva - Baurú (Alero)
Fue el máximo anotador del campeón durante el Final 8 con media de 15.0 puntos y estuvo muy efectivo detrás del arco con un porcentaje de acierto de 52 por ciento (27-14). También fue de gran ayuda en los tableros con 6.4 rebotes por partido. En los últimos cuatro juegos alcanzó el doble dígito en anotaciones.
Ernesto Oglivie - Titantes (Ala-pívot)
El panameño volvió a demostrar su poder en la zona pintada para el multicampeón colombiano, dejando números de 19.3 puntos, 6.8 rebotes y 1.2 asistencias durante el Final 8. En el partido por el tercer lugar ante Oberá fue el mejor hombre de la cancha con 26 unidades (2-3 en triples) y 8 tableros.
Charles Mitchell - Oberá (Pívot)
El espigado jugador de 2.04 metros de estatura, además de ser una amenaza cerca del aro, también tiene la versatilidad para anotar desde largo rango. Fue el eje ofensivo de Oberá con sus 18.0 puntos y 7.5 rebotes en el Final 8. En la Semifinal contra San Martín hizo lo que estuvo a su alcance para evitar el revés con un doble-doble de 20 tantos y 10 tableros.
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