TOKYO (Japan) - Estados Unidos acumuló un asombroso séptimo título de baloncesto olímpico femenino consecutivo después de que Brittney Griner demostrara ser fuerte para la nación anfitriona, Japón, al encabezar un triunfo por 90-75 en el Saitama Super Arena.

La imponente pívot anotó 30 puntos para superar los 29 anotados por su compatriota Lisa Leslie en los Juegos de Atlanta 1996 y establecer un nuevo récord de anotación en la final olímpica de baloncesto.

Japón necesitaba un comienzo rápido y realmente ponerse en marcha si querían lograr el final de cuento de hadas definitivo, pero no podían encontrar su rango de tiro. Con Estados Unidos demasiado fuerte debajo de la canasta en lo que fue su décima aparición de oro en el partido por la medalla de oro, incluso cuando Japón cobró vida ofensivamente, simplemente no pudieron detener el flujo de anotaciones estadounidenses.

La victoria también le dio al dúo veterano Diana Taurasi y Sue Bird el adiós que querían, ya que la pareja reclamó una impresionante quinta medalla de oro en los Juegos.

Punto de inflexión: podría decirse que no hubo uno, ya que Estados Unidos pasó por encima deJapón y nunca miró hacia atrás. Cuando sus oponentes se recuperaron y se recuperaron poco antes del descanso, el equipo de Dawn Staley anotó ocho puntos seguidos para reafirmar el control y siempre tuvieron a Japón con los brazos extendidos después de eso.

Héroe (s) del partido: Griner lo encontró demasiado fácil en el aro y terminó con 30 puntos. Su compañera de pintura, A'ja Wilson, también tuvo un cumpleaños para recordar con 19 puntos en lo que ha sido un debut soñado para ella en estos Juegos. Por su parte, Breanna Stewart se mostró como de costumbre con 14 puntos, 14 rebotes y 5 asistencias.

Las estadísticas no mienten: Estados Unidos lanzó casi el 60 por ciento desde el rango de dos puntos y tuvo 58 puntos en la pintura. Japón simplemente no pudo hacer frente.

En pocas palabras: Japón ya había realizado un sueño de disputar el partido del título e hizo un trabajo increíble en el camino a la final, ganándose el respeto y la admiración de los aficionados de todo el mundo. Soñaron en grande y quisieron dar el último paso, pero no pudieron competir físicamente con el tamaño de EE. UU, que también hizo un buen trabajo al anular el impacto de Rui Machida, que ha hecho que Japón funcione durante todo el torneo. En última instancia, Japón puede haber perdido este partido, pero hicieron historia con un primer lugar en el podio, una primera aparición en la Final y, liderados por el entrenador Tom Hovasse, apreciarán esta medalla de plata. Este equipo sigue siendo el orgullo de su nación.

¿Qué decir de EE. UU? Es un legado increíble que han continuado con el título número nueve. Fueron dominantes de cabo a rabo y terminaron el torneo muy por encima de cualquier otra nación. Nadie se acercó realmente. Poniendo el listón tan alto de nuevo, están muy por encima de la competición y pueden regresar a Estados Unidos emocionados con el trabajo realizado por los entrenadores, jugadoras y personal.

Ellos dijeron: "Ha sido un viaje tremendo y siempre es algo especial armar un equipo y crecer hacia una meta. No sabíamos quiénes éramos al principio. Pero en este último día, nos encerramos e hicimos las cosas necesarias para otra medalla de oro. Siempre hay presión cuando te pones esta camiseta. Siempre encontramos la manera y hacerlo con clase. No hay nada como jugar en los Juegos Olímpicos. He sido parte de la universidad y de la WNBA, pero cuando pones ese Estados Unidos en tu pecho, estás jugando para todos en el país", dijo Diana Taurasi, quien agregó:" Me encanta París", con respecto a si realmente estaba retirada.

"Definitivamente se acabó... Pero no podría estar más feliz. Siempre es difícil ganar una medalla de oro, pero este año hubo tantos desafíos sin aficionados, sin amigos o familiares. Fue tan aislado en muchas maneras, para que nuestro equipo lidie con esa adversidad y lo haga es muy especial", Sue Bird, que está colgando los zapatos.

"El viaje en el que hemos estado como equipo ha sido largo y ha habido picos y valles en el camino, pero ver a las jugadoras con la medalla de plata y la mirada de orgullo en sus rostros valió la pena por todo lo que hemos pasado. Feliz por el baloncesto de Japón, las jugadoras y el personal. Estoy seguro de que esto se recordará más en los próximos días. El partido de hoy no fue como lo había imaginado. Pensé que seríamos efectivos en más cosas, pero su defensa fue fenomenal y nos asfixiaron. Nos quitaron el ritmo. Simplemente no pudimos detener su juego interior en absoluto. Pero todo nuestro equipo anotó una canasta hoy y todos pueden decir que ahora han marcado en una final olímpica, que es bastante ". El entrenador de Japón, Tom Hovasse

Al estar en la grada frente a sus jugadoras solas, mientras recibían sus medallas de plata, "Me golpeó un poco, fue muy conmovedor y me emocioné un poco y eso es parte de la melancolía que siento. Seguro que va a pasar - la carrera de este equipo en particular ha llegado a su fin y hicimos nuestro mejor esfuerzo -. Me sentí como un padre para todos en ese escenario, verlos fue muy emotivo, pero muy agradable".

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