GUAYAQUIL (Ecuador) – La Federación Ecuatoriana de Basketball (FEB) vive un antes y un después a partir de un nuevo proceso, que comenzó en el 2013 y hasta este año, donde particularmente se enfocó en el desarrollo formativo de los niños para intentar mejorar una liga de primera división, que llegue a la duración de entre 6 y 7 meses y que haga espejo en ellos y así aumentar los talentos para las selecciones nacionales de Ecuador.

Desde hace 3 años, John Escalante y su cuerpo técnico están a cargo de las diferentes selecciones de las categorías menores de Ecuador, habiendo participado en un Premundial, siendo la primera vez que la rama masculina pudo acceder a un evento de tal magnitud e importancia para su país.

Ahora es el turno de la categoría 2002, que afrontará un nuevo torneo, con el apoyo de la FEB, que ha realizado una gran inversión para la formación y desarrollo de esta categoría. Así fue como se realizaron 9 micro ciclos de entrenamientos, algunos de 3 días y otros de 5, que han servido como preparación, además de eventos importantes realizados en Ecuador, que han permitido seleccionar a los atletas de la U17, que en un inicio fueron 40.

La Selección U17 cuenta con un entrenador de experiencia en estas categorías como lo es el Escalante y su asistente Raúl Vilatuña.

Un antecedente relevante para el baloncesto de Ecuador, que invita a intentar buscar nuevamente una medalla en este Torneo Sudamericano (25 al 30 de noviembre en Santiago de Chile), es el de haber conquistado dos medallas de bronce, la primera con la Selección U17 en el Torneo Sudamericano en Lima Perú, 2017, que les permitió la clasificación al Premundial en Canadá, mientras que la U14, bajo la dirección técnica de Vilatuña y con la supervisión de Escalante, la logró en el Torneo Sudamericano en Goiana, Brasil, este año.

Con estas medallas, Ecuador volvió a posicionarse entre las selecciones de Sudamérica. En las redes sociales, lo conseguido por el equipo nacional en Brasil, se destacó como un logro “brillante como el bronce y valioso como el oro”.

Para la fase final de los entrenamientos de cara al nuevo Sudamericano, 12 jugadores se concentrarán en la ciudad de Guayaquil, a partir del 20 de noviembre, para emprender viaje a Santiago de Chile y afrontar un nuevo desafío.

En la previa del Torneo se realizó un trabajo enfocado en objetivos ofensivos y defensivos de juego, tales como conseguir un porcentaje de tiros de campo del 40%, lanzar un mínimo de 55 tiros a la canasta, un porcentaje del 70% desde la línea de tiros libres, conseguir 20 asistencias, no cometer más de 10 pérdidas de balón, tener 2 jugadores con más de 16 puntos, anotar al menos 65 puntos por juego; mantener al equipo contrario en un porcentaje de tiros de campo del 47%, dejar que tiren un máximo de 45 veces a la canasta, permitir un máximo de 14 tiros libres, perder 5 rebotes defensivos, dejar que consigan un máximo de 10 asistencias, forzar un mínimo de 20 pérdidas de balón, entre otros objetivos.

 
“El equipo tiene atletas grandes y fuertes y estamos bien preparados, si bien las distancias de las ciudades de donde son los chicos son lejanas, se han hecho sacrificios para entrenar y estamos expectantes por representar al país. Es una camada interesante, con uno de los chicos habiendo jugado en el Premundial de Canadá y 3 con participaciones en torneos sudamericanos”, dijo el seleccionador nacional, John Escalante, en FIBA.basketball.com.

Este seleccionado contará con la presencia de Kevin Vera, oriundo del cantón azuyayo Chordeleg, que ha integrado el Seleccionado U17 a los 14 años. Tiene una estatura privilegiada entre los basquetbolistas del país. Hoy con 16 años, mide 2.12 metros y su proyección máxima de crecimiento es de 2.16 m. Una talla ideal para un joven que anhela triunfar y que hoy juega en la Liga Nacional de Baloncesto de Argentina, a la misma vez que cumple con sus estudios escolares, con el deseo de pronto dar un salto a Europa.

“Con mi salida al exterior, estoy cumpliendo mi primer sueño y ojalá se concreten todos los que tengo en mente, jugar en la Selección y representar a Ecuador es uno de ellos”, expresó.

Desde hace algún tiempo ha habido un cambio radical desde la dirigencia en Ecuador. “Hemos tenido mucho apoyo de la FEB y se han realizado muchos torneos, los jugadores llegan con 40 partidos al año y eso es muy bueno para los seleccionadores”, expresó Escalante.

En Ecuador además existe una Escuela de Entrenadores la cual ayuda a los seleccionadores a obtener herramientas para implementarlas en sus selecciones nacionales. “Se busca un camino para que todos manejen los mismos conceptos y buscar la misma identidad de juego”, contó el coach.

Además, el entrenador se refirió al nuevo baloncesto de Ecuador: “Nuestro equipo es pequeño comparado con los otros de Sudamérica, pero estamos llegando mejor a los próximos torneos. La mejora de los entrenadores y por ende del juego de las selecciones del país, harán que en algún momento las selecciones que afrontemos no disfruten de jugar con nosotros y cambien el concepto que tienen de Ecuador. Tenemos nuevas filosofías de juego para que los jugadores se sientan seguros”.

Con la llegada de José Arévalo a la presidencia y su grupo de dirigentes, la FEB asumió el proceso de enviar a las categorías masculinas a los torneos internacionales. Hoy en el país ecuatoriano se habla de medallas, clasificaciones y victorias, con la siembra que se inició en el Mini Baloncesto junto a los padres de familia y con el apoyo constante de la Federación, que apostó a largo plazo con un trabajo sólido en todas las categorías.

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