CÓRDOBA (FIBA Americup 2017) - Dos años después, Argentina y México vuelven a cruzarse en semifinales de un torneo continental. Esta vez será por la Americup 2017, en la cual los aztecas buscarán quitarse la “espinita clavada”, según palabras del entrenador Sergio Valdeolmillos, quien aún tiene muy presente aquella derrota que los dejó sin boleto para los Juegos Olímpicos de Río 2016.

“Deberemos pensar el partido desde la defensa. Argentina estará en su casa, con su gente, y por ello tenemos que hacer un juego duro desde primera hora”, remarca el técnico español.

“No podemos permitir que Argentina desarrolle sus mejores armas, ya que tienen un gran talento. Tenemos que leer muy bien nuestro ataque y seleccionar nuestros tiros. Debemos encontrar un equilibrio y, sobre todo, jugar a partir de la defensa”, insiste en relación con el cruce de semifinales a disputarse este sábado en el Orfeo Superdomo de la ciudad de Córdoba.

En cuanto a la identidad de su equipo en este torneo, Valdeolmillos coincide con su colega argentino, Sergio Hernández, quien había planteado que los tricolores se sienten a gusto con posesiones más largas y un juego sin el vértigo del joven seleccionado local. “Es cierto: jugamos con un mayor número de pases y si bien tenemos cierta verticalidad, no somos tan incisivos como ellos en la primera opción de juego”, analiza.

Por supuesto, el recuerdo del cruce de “semis” del Torneo de las Américas 2015, en un repleto Palacio de los Deportes mexicano, aparece en el recuerdo del entrenador nacido en la ciudad española de Granada. “Creo que hay una cierta rivalidad positiva entre Argentina y México. A nosotros se nos escapó aquel juego. Lo volví a ver muchas veces y siento que hubo un punto de inflexión cuando Jorge Gutiérrez se fue de la pista. Tengo muy en mente que no lo podían parar. Teníamos un control absoluto del juego y estábamos ocho puntos arriba. A partir de ahí todo cambió”, rememora.

Por ello, en su mente repiquetea el deseo de desquitarse de aquella noche con récord de asistencia en un Torneo de las Américas: 20.020 espectadores que fueron testigos de la clasificación albiceleste para los Juegos de Río 2016.

“Tenemos esa espinita clavada, por supuesto. Ahora somos dos equipos totalmente diferentes, pero de todos modos creo que será un partido bonito”, describe. “Para los jugadores, un pabellón lleno y cargado del fervor con el que se juega en Argentina, siempre es una motivación. Hemos hablado de ello y no queremos que el ambiente o el entorno nos afecten negativamente. Por ello, no queremos tener errores propios. Si nos equivocamos, deberá ser por virtudes de Argentina”, completa Valdeolmillos.

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